EL YO PROFUNDO

POR JOHN C. LILLY

LA EXPERIENCIA DE AISLAMIENTO EN EL TANQUE

En el concepto original, la soledad, aislamiento y confinamiento del tanque fue creado como un instrumento de investigación en 1954. Durante el seguimiento de 23 años de trabajos con el tanque, he encontrado varias maneras de hacer el aparato en sí más simple y seguro.

En los tanques originales, estabamos obligados a llevar unas máscaras bastante complicadas en la cabeza para poder respirar debajo del agua. Esto ha sido completamente eliminado.

En los últimos modelos del tanque, usamos una solución saturada de sales de Epsom (MgSO4-7H2O) a una solución de densidad 1.30 gramos por centímetro cubico. Fue descubierto que esta densidad de solución permite flotar de una forma supina y tener todo el cuerpo en o cerca de la superficie del liquido. Flotan las manos, los brazos, las piernas, los pies y lo más importante de todo es que flota la cabeza. Hemos visto que incluso la persona más delgada con un mínimo de grasa de esta manera flota en el tanque.

Con estas simplificaciones técnicas se ha sucedido que hemos inventado un método de lograr el más profundo descanso que jamás hayamos experimentado. El instrumento de investigación se ha transformado en una posibilidad práctica para los inexpertos en la investigación. Tenemos historiales de más de 500 casos de personas, quienes han usado el tanque por una o más horas y varios casos de un uso más intensivo, de hasta cientos de horas. La seguridad de este método usado por personas normales y corrientes está demostrado por el hecho de que las personas van desde una ama de casa, un hombre de negocios, científicos, místicos, hasta niños.

La pre-programación de algunos usuarios de nuestros tanques ha continuado por el hecho de mi investigación personal usando el tanque y la publicación de trabajos. Tal clase de pre-programación genera expectativas en la mente de diferente tipos de persona sobre lo que experimentaran cuando se metan en el tanque.

No es necesario tener alguna expectativa al entrar en el tanque. Uno puede entrar para descansar, para escapar de la atareada vida por una hora o dos; puede que tengas un problema en medio de la noche en cuyo caso el tanque es más apropiado para relajar los músculos que una cama, proveyendo de un descanso que se necesita físicamente, y al mismo tiempo permite continuar las operaciones mentales para resolver el problema.

No he dejado claro en publicaciones previas que este "descanso" es mi uso principal personal del tanque. Siempre que haya sido posible he instalado un tanque en mi entorno, da igual donde estuviera. Primero uno en el Instituto Nacional de Salud Mental (Bethesda, Maryland); hice uno en las Islas Vírgines (Saint Thomas, U.S.V.I.) y uno en Miami en el laboratorio de delfines. En nuestra presente ubicación (Malibu, California), durante los dos últimos años, hemos tenido tantos como cinco tanques trabajando simultáneamente.

Encuentro esencial el poder relajarse completamente sin tener en cuenta cualquier otra cosa que esté sucediendo alrededor en ciertos momentos.

Algunas veces me levanto en medio de la noche con una idea con la que quiero trabajar, de modo que en vez de molestar a mi esposa, floto en el tanque y trabajo sobre la idea, en su total magnitud y con gran detalle. Entonces a la mañana siguiente soy capaz de pasarla a papel o dictarla.

Para un hombre de negocios, un científico, un profesional de cualquier índole, esto es un beneficio: poder pensar, libre de la fatiga del cuerpo. El método permite ser libre en sólo unos minutos.

En algunos casos la fuerza del campo de gravedad y las fuerzas antigravitatorias del cuerpo causa dolor, bien sea, por la artritis, huesos rotos, o cualquier otro tipo de enfermedad. El tanque es especialmente beneficioso para esta gente ya que alivia estos dolores de una manera que nada más puede hacerlo.

Recientemente tuve un accidente en bicicleta y me rompí varios huesos. Tan pronto como regrese a casa del hospital, me encargue de hacer cambios a un tanque, de tal manera que, incluso todavía convaleciente, pudiera meterme dentro. No había dormido durante un periodo de tres noches consecutivas. En cuanto empecé a flotar, el dolor desapareció mientras flotaba en la superficie de la solución de sales de Epsom, dormí profundamente durante una hora y media, el sueño más profundo que jamás he tenido. En este caso en particular salí con una frescura increíble. Para dormir en el tanque tenemos una especial forma de flotar para la gente que lo necesita; para sentirse seguro: la cabeza no girará de lado mientras estén durmiendo.

Para aquellos quienes hacen meditación, es también una ayuda definitiva. Resulta que el tanque y su entorno aislado producen lo que uno debe hacer dentro de su propio cuerpo-mente, cuando meditas en circunstancias normales. Mientras meditas, sentado con las piernas cruzadas o en una silla o tumbado en la cama, examinas el entorno, los sonidos provenientes de este y cualquier juego de luz que este cambiando alrededor de este entorno. Poco a poco durante la meditación, uno puede inhibir las reacciones de estos patrones de estimulación y penetrar profundamente en la propia mente.

El tanque elimina la presencia de estos patrones cambiantes y sus alteraciones y reduce la intensidad de estimulación hasta el nivel más bajo posible; esta "reducción" del entorno permite empezar la meditación en un punto que sólo se consigue fuera del tanque después de un trabajo inhibitorio y de haber gastado algo de tiempo haciéndolo. En el tanque no necesitas hacer este trabajo. Sin estar distraído, empiezas inmediatamente a concentrarte en las percepciones internas y buceas profundamente dentro de la mente una vez que estés entrenado en como hacer esta transformación.

Algunas personas llegan al tanque esperando que pasen ciertas cosas. -Todo lo que podemos decir a estas personas es- Nada pasara que tu ya no sepas de antemano; no puede ocurrir nada que tú no quieras que pase, es decir: "Lo prohibido no está permitido". Algunas personas esperan que sea posible programar representaciones visuales, manifestaciones acústicas, y varios tipos de sensaciones corporales o movimiento dentro de espacios no habituales de su cuerpo y mente propios. Todo lo que podemos decir a estas personas es que uno debe desarrollar una disciplina para poder hacer lo que uno quiere. La meta-programación de uno mismo es exactamente eso: una disciplina. No es un conjunto dado en un ordenador biológico particular. Forma parte de la meta-creencia del operador. El operador de meta-creencia es un sistema de creencias que dirige y controla nuestras creencias, es decir, creencias sobre creencias. Un operador de meta-creencia que hemos encontrado en nuestro trabajo en el tanque es como sigue:

"En la providencia de la mente, dentro de la realidad, lo que uno cree ser cierto, o es cierto o bien llega a serlo dentro de ciertos límites. Se descubren estos límites experimentando, usando la experiencia. Cuando estén descubiertos, se encuentra que estos límites son simplemente una creencias más para ser transcendidas".

A este operador de meta-creencia particular que controla la expansión de nuestro sistema de creencia, siempre añadimos precaución: "El cuerpo impone límites definidos". No estamos seguros de qué límites corporales pueden ser transcendidos; sin embargo, puedes tener creencias sobre tus propios límites físicos que pueden ser transcendidos en un entorno seguro como el tanque, dejando que el cuerpo, por decirlo así, haga lo que tenga que hacer.

El tanque está diseñado para cuidar los límites del cuerpo. La temperatura es mantenida entre 36º y 37º C. Hemos comprobado que ciertas personas prefieren 36º y otras 37º. Sin embargo una vez que la temperatura esté ajustada, se mantiene en un margen de un décimo grado. El aire que uno respira es renovado por encima del agua del tanque por una bomba muy pequeña y silenciosa. Cuando nadie está en el tanque, el agua es bombeada a través de un filtro para limpiarla de cualquier substancia que previamente se haya dejado en el tanque. El agua y las sales de Epsom son renovadas después de varias docenas de horas de uso.

El tanque es una ventaja para cualquiera que lleve una vida ajetreada. Te permite tener un descanso más rápido que en una cama que está en un cuarto oscuro. Te permite experimentar con estados que no podrían ser experimentados de otra manera con tanta seguridad: estados de ser, estados de consciencia. Por ejemplo, puedes hacer una pregunta: "Si estoy fatigado por un largo día de trabajo, ¿qué es lo puede hacer el tanque por mí?".

Flotar en el tanque después de un atareado día de trabajo trae gran alivio. De repente desaparece toda la estimulación de mantenerse derecho contra la gravedad. Uno se da cuenta de que la fatiga acumulada durante el día es causada por mantener el cuerpo derecho en el campo gravitatorio. Desde un punto de vista neurofisiológico tienes inmediatamente liberados una gran masa de neuronas por la necesidad de la constante computación como la dirección de la gravedad, la programación por la entrada de datos visuales y acústicos, por los cambios de temperatura, etc. Por ejemplo, el cerebelo ahora está libre para usarse en algo más que para mantener el equilibrio del cuerpo.

En resumen, entonces, la experiencia en el tanque es muy refrescante y descansada. Si quieres ir más allá de esto, puedes hacerlo hasta los límites de la disciplina mental y hasta los límites de la imaginación.

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